Catalina y Julieta: una historia de montañas y gimnasia que inspira a la comunidad UAM
En la Universidad Autónoma de Manizales creemos en las historias que transforman, aquellas que nos recuerdan que los sueños se conquistan con esfuerzo, disciplina y el apoyo de quienes más queremos. Hoy celebramos a Catalina Rocha Ruiz, docente del programa de Artes Culinarias y Gastronomía, y a su hija Julieta Rosales Rocha, estudiante de segundo semestre de Diseño de Modas, quienes desde las montañas y la gimnasia nos enseñan el verdadero significado de perseverar.
Catalina: la fuerza de una montaña
Catalina alcanzó recientemente la cumbre del Nevado del Tolima (5.225 msnm), un logro que describe como “una emoción comparable a graduarse, después de tanta preparación y sacrificio”. Para ella, cada montaña es una maestra: enseña humildad frente a la grandeza del universo, sensibilidad ante lo que otros no ven y la importancia del trabajo en equipo.
“Cuando llegamos arriba lo único que pude hacer fue pensar en mis papás, que en algún momento transitaron esos mismos caminos, pensar en mi familia y llorar de la emoción. La montaña me recuerda que no estamos en medio de la nada, sino en medio del todo”, cuenta Catalina.
Su próxima meta: llegar en noviembre a la cumbre del Nevado Santa Isabel y en 2026 conquistar, junto a su grupo, varias cumbres en la Sierra Nevada del Cocuy.
Julieta: la pasión que se eleva con cada salto
Julieta encontró en la gimnasia artística el escenario perfecto para expresar su disciplina y su espíritu competitivo. Su participación en el Campeonato Nacional USAG Masificación en Barranquilla, donde compitió en la categoría Nivel 6 entre más de 900 gimnastas, fue un reto y una victoria personal.
“Todo en la vida es confiar en uno mismo. Todos pueden decirte que eres capaz, pero si no confías en ti, no lo logras. Ese ha sido mi mayor aprendizaje en la gimnasia y en la vida”, afirma Julieta.
Entre entrenamientos de más de tres horas diarias y la exigencia académica de su carrera en Diseño de Modas, ha aprendido a organizar cada minuto de su día para poder brillar en ambos mundos. Su sueño ahora es clasificar al Nacional de Mayores con el equipo Caldas, un reto que asume con la misma pasión con la que se prepara para cada salto.
Una herencia de esfuerzo y sueños compartidos
La historia de Catalina y Julieta no solo es la de dos mujeres UAM con grandes logros, es también la de una mamá y una hija que se acompañan en cada meta. Catalina conquistando cumbres en las montañas y Julieta alcanzando alturas en el tapiz de gimnasia, ambas demuestran que la disciplina y el amor por lo que se hace se transmiten de generación en generación.
En la UAM celebramos a Catalina y Julieta como ejemplos de disciplina, trabajo en equipo y resiliencia. Ellas nos recuerdan que, ya sea en la cima de una montaña o en la ejecución de un salto perfecto, los sueños se conquistan con pasión, constancia y confianza en uno mismo.