A raíz del COVID-19, las intervenciones en neurorehabilitación se han visto en la primera línea de intervención en salud, cuyos objetivos han sido orientados a contrarrestar las secuelas que se presentan tanto en adultos como en adultos mayores y en los últimos días, con las transformaciones del comportamiento del virus, en adolescentes, niños y recién nacidos.

“A la fecha, se ha reportado en la literatura entre un 45 % y 48 % de complicaciones asociadas al COVID en el del sistema nervioso central (produciendo enfermedades cerebrovasculares, vasculitis, síndromes confusionales, epilepsia) y el sistema nervioso periférico (neuropatías, Guillán Barré, neuropatías craneales) generando compromiso motor y sensorial, además de alteraciones cognitivas y de la salud mental, todas estas con diferentes grados de afectación", comenta Mónica Yamile Pinzón Bernal, coordinadora de la Especialización en Neurorehabilitación y la Maestría en Neurorehabilitación de la Universidad Autónoma de Manizales.

Por tal motivo, el papel del neurorehabilitador va desde el escenario clínico de hospitalización, hasta el ámbito ambulatorio, teniendo en cuenta que los tiempos de intervención varían dependiendo de la magnitud del daño que se provocó y de la situación general de la persona que está sujetos en gran medida del nivel de funcionamiento motor y respiratorio.  Es además un área de trabajo que debe estar ligada al apoyo de otros profesionales de la salud con el fin de promover la máxima recuperación posible de la persona y el apoyo a través del cuidado de familiares.

De otra parte, ¿qué ha pasado con los servicios de neurorehabilitación en los tiempos de pandemia para los usuarios que habitualmente recibían este tipo de servicios?

La docente de la Universidad Autónoma de Manizales explica que Esto generó una transformación en los medios de intervención y promovió el uso de las nuevas tecnologías de la comunicación y de la información. En el mundo se reporta el uso de plataformas para teleconsulta y teleasistencia, así como el incremento del uso de aplicativos móviles y de escritorio orientados por los neurorehabilitadores, de manera tal que no se perdiera el acceso y la continuidad a los tratamientos. En Colombia, dadas las condiciones actuales, en general el uso más frecuente para el proceso fue a través de la videollamada a través de sistemas gratuitos como el Whatsapp.

Es por esto que la Especialización en Neurorehabilitación y la Maestría en Neurorehabilitación de la Universidad Autónoma de Manizales (UAM), se actualizan constantemente, haciendo frente a las demandas del momento y respondiendo a las necesidades de formación de nuestros fisioterapeutas.

"Igualmente durante estos tiempos de pandemia que han establecido retos para la ciencia y para la academia, hemos estados desde el posgrado en tono con los nuevos paradigmas y los cambios en las formas de trabajar, por tanto, como un desafío a la situación actual se ha continuado con nuestra formación y con el desarrollo de diferentes eventos académicos virtuales como conferencias y el III Encuentro Internacional en Neurorehabilitación, donde se ha podido interactuar con excelente ponentes nacionales e internacionales para temas relacionados con las nuevas fronteras de la práctica en el área" expresa la docente.

"Por otra parte, se ha podido a través de los resultados de las investigaciones de la maestría socializar el conocimiento a través de las diferentes publicaciones en revistas internacionales indexadas además que los avances conceptuales y pese a los tiempos tan complejos permitieron generar cursos de extensión como el curso de “fisioterapia en neonatos”, concluye Mónica Yamile Pinzón.

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